Estas afecciones son uno de los trastornos más comunes que requieren cirugía. El conocimiento anatómico preciso y la habilidad quirúrgica son tan importantes para un resultado final adecuado como para cualquier otra disciplina de la cirugía.
¿Qué es una hernia?
Por definición, una hernia es la protrusión de una víscera a través de una apertura en la pared de la cavidad que la contiene. Las características importantes de una hernia son el orificio y el saco herniarios. El orificio es el defecto en la capa aponeurótica más interna del abdomen y el saco una protusion de peritoneo. El cuello del saco herniario corresponde al orificio. La hernia es externa si el saco sale por completo a través de la pared abdominal e interna si se encuentra dentro de la cavidad visceral. La hernia es reductible cuando es posible regresar al abdomen la viscera que ha salido e irreducible si esto no es factible. Una hernia estrangulada es aquélla en que se compromete la vascularizacion de la víscera que ha salido; ocurre en las que tienen orificios pequeños y sacos grandes. La hernia incarcerada es una irreducible, pero no necesariamente estrangulada.
¿Se deben de operar todas las hernias?
En general, deben repararse todas las hernias a menos que el estado local o sistemático del paciente impida un resultado final seguro.
HERNIA LAPAROTÓMICA O INCISIONAL
Este tipo de hernias son un problema quirúrgico importante. Sus dos causas principales son obesidad e infecciones. El peso del panículo adiposo separa literalmente la incisión quirúrgica y una infección impide que cicatrice la herida. En hernias incisionales grandes de larga duración las vísceras pierden su derecho de dominio en el abdomen y son mas dificiles de tratar.